Por mi cabeza sólo ronda un nombre y es el tuyo.
Que manera tan vaga y tonta de atormentarme cuando sé que mientras más pasa el tiempo, más quiero saber de ti.
Esa no pudo ser nuestra despedida por favor no, me consume por dentro saber que te vas ir y sé que estarás cerca. Pero ¿dónde quedo yo?
Un minuto más...